Como dice el dicho ojos que no ven corazón que no siente... Llevo practicamente toda mi vida fingiendo ante los demás y tratando de cerrar los ojos para no sentir, para no ver lo que se encuentra en el exterior de mi burbuja y de pronto un día me ayudan a abrir los ojos y me doy de bruces con la realidad y como duele...
No es sencillo aceptar que todo tu mundo, toda tu vida es un auténtico caos. No es agradable comprobar que todo está patas arriba y que nada de lo que tienes está ocupando su lugar. Es muy difícil ser consciente de todo lo que queda por cambiar para poder llevar una vida relativamente normal y no saber ni siquiera por donde empezar porque es practicamente todo lo que está mal.
Cada día está plagado de esfuerzos titánicos constantes, levantarme por las mañanas, comer, vestirme, mirarme en el espejo, salir a la calle, en definitiva TODO me cuesta tanto... Trato de ser positiva y pensar que si pongo todo de mi parte algún día las cosas mejorarán pero ¿cuándo será eso? ¿cuánto tiempo me llevará conseguir recomponer el puzzle si todas y cada una de las piezas están desordenadas y algunas incluso perdidas? ¿cómo conseguir hacer aquello que siento que no puedo hacer a pesar de mis intentos? Poner todo de mi parte implica hacer cosas que hoy por hoy no me veo capaz de hacer, dar pasos que no puedo dar porque me quedo completamente paralizada y ni siquiera sé si algún día eso cambiará, si algún día las palabras fluirán libremente en la dirección adecuada.
Mis noches son horribles plagadas de ansiedad, llantos, sin apenas poder conciliar el sueño... y cuando por fin logro dormir vienen las pesadillas y me despierto sobresaltada, con taquicardia y muchas veces con lagrimas en los ojos. Después amanece un nuevo día y con él empieza la verdadera pesadilla... me cuesta un mundo levantarme cada mañana de la cama, enfrentarme a la rutina y a las cosas cotidianas del día a día. Simplemente dejo los días pasar y ansió que llegue el momento de volver a meterme en la cama.
Me siento terriblemente sola (sé que es solo una sensación), vacía y tan pequeña... y ya de nada sirve que me refugie en mi trastorno alimentario, en nada ayuda. Los sentimientos ahora se han vuelto tan intensos que no hay nada que los logre tapar ya. El TCA solo es la punta del iceberg y ahora está empezando a salir a la superficie todo lo que hay debajo y es tan duro remover aquello que llevo toda mi vida tratando de olvidar. Se me hace cuesta arriba enfrentarme a ello y asimilar tantas otras cosas que habían tras esa gruesa capa que he ido formando con el paso de los años y de las que yo no era o no quería ser consciente. Ahora todo se ha desmoronado incluso aquello que estaba convencida que se sustentaba sobre una base sólida porque yo misma me engañaba, todo era mentira, una farsa... nada es idílico, ni siquiera normal y como cuesta aceptarlo... y como me va a costar modificarlo.
Estoy mal, realmente mal... animícamente hablando. Estoy completamente apática con ganas de meterme en la cama para no salir durante días, me siento triste con unos niveles de ansiedad importantes, me siento fuera de lugar incluso en mi propia casa, sin ganas de ver a nadie... puede que en realidad nada haya cambiado, todo sigue "igual" pero algo en mi si que ha cambiado y esque ahora consigo ver muchas de las cosas que antes no me permitía o me negaba a ver y he de reconocer que no me gusta nada lo que me he encontrado al abrir los ojos porque la mayor parte de la responsabilidad de que todo sea así (aunque sea compartida) recae sobre mí.
Me encantaría irme lejos, desaparecer... incluso por muy duro que suene a veces desearía que en su momento me hubiesen ingresado, que esa fuese mi única opción porque probablemente habría sido mejor para todos perderme de vista.
Por otro lado e independientemente de lo que he hablado arriba, no quiero subir de peso pero sé que tengo que hacerlo, ahora mismo no tengo opción. Trato de cumplir las pautas y lo voy consiguiendo pero me da la sensación de que por más que cambie mis actos, por más que modifique mis conductas los sentimientos no solo no menguan si no que se hacen más fuertes y en consecuencia todo duele más. Soy consciente de que estando en infrapeso no puedo estar objetivamente gorda y por mi salud debo aumentar aunque sea un poco pero tengo tanto miedo... porque si estando en un peso en teoría bajo tengo que ducharme con los ojos cerrados porque no soporto verme, cuando me tumbo en el sofá necesito ponerme varios cojines sobre mí para ocultar mi cuerpo bajo ellos y así otras tantas cosas... ¿Cómo me sentiré cuando engorde? Y ya no es el mero hecho de engordar... si no: ¿a qué me aferraré cuando sienta que ya no puedo más? Soy capaz de comer con relativa normalidad pero ¿llegará el día en el que deje de doler todo tanto? ¿Llegará el día en el que lo que resulta cotidiano para la inmensa mayoría se convierta en cotidiano también para mí?
Me duele leerte tan triste.
ResponderEliminarA veces construimos murallas a nuestro alrededor o en nuestro interior para no enfrentarnos a lo que de verdad duele. Una de esas murallas suelen ser los TCA: mientras miramos la báscula, el espejo, calorías y demás, no ahondamos más en el problema real. Y sí, verlo de frente duele, pero es la única manera de al fin ser libres, porque sólo enfrentándote a esos miedos, inseguridades... podrás realmente tratar el problema real.
Puede que ahora lo veas una muralla, que no puedes enfrentarlo y mucho menos solucionarlo, pero es algo que se va haciendo poco a poco, con valentía... y finalmente llega un día en el que miras atrás y te dices a ti misma: "realmente no era para tanto, ojalá hubiera podido verlo antes".
En cuanto a intentar huir lejos, has de saber que no funciona (tantas veces lo intenté...), porque el problema real está en nosotras mismas, en cómo vemos o afrontamos las cosas, así que ese problema se viene con nosotras allá adonde vallamos. Por desgracia, o por fortuna, no podemos huir de nosotras mismas, así que como sea hay que solucionar este tipo de problemas.
A ver si lo que te ocurre es que con tanta fiesta que se avecina no te sientes demasiado acorde con el ambiente... No, no es broma, a mí me pasa desde hace años, pero me digo a mí misma que disfrutaré de la fiesta en la medida en la que lo desee y me sienta a gusto. A veces es algo, a veces bastante (pero menos que la mayoría), y otras veces me tomo estos días como días de estudio intenso de piano, o días sabáticos de lectura... Cada cual ha de aprender cómo es la manera en la que mejor se siente o mejor se acopla a la vida, y no tiene porqué ser haciendo lo que haría la mayoría de la gente...
Te envío muchos ánimos y un abrazo muy fuerte...
aw prin no se qe decirte
ResponderEliminarme siento super mal
al leerte asi de triste
y deprimida TT.TT
nenis trata de tomarte unos dias
libres, lejos de toda la rutina
lejos te todo... sin tener qe
hablar... sin tener qe pensar
aw prin necesitas relajarte
espero qe pronto estes mejor
y qe te animes aw prin
u.u encerio me preocupas
tqmmmmm chao